Basamos nuestro éxito en hacer y no en “recetar” (decir que se haga).
Lean manufacturing dispone de tantas y tan variadas herramientas que es fácil encontrar algunas que resulten útiles para mejorar determinadas situaciones. No obstante, la simple aplicación de herramientas, aún haciéndolo bien, se queda en una solución coyuntural, pues la causa raíz no es resuelta y el problema acaba reapareciendo, incluso haciendo más daño.
Nuestro método propone sincronizar las actividades de la organización para que funcione como un engranaje perfecto.
Las herramientas “lean” son, para nosotros, el lubricante que engrasa la máquina que es la empresa , puede mitigar un determinado problema pero no resolverlo. Para una puesta a punto será necesario analizar cual es la energía que impulsa a la máquina, como engranan las ruedas que la mueven y cual es el resultado producido en términos de rentabilidad y satisfacción de los clientes.